12 de Noviembre- Día del cartero
Pues si, el 12 de noviembre es el día de El Cartero.

Antes, cuando las noticias de la familia, de los seres queridos o de las instituciones llegaban por carta, los carteros eran una figura destacada en la sociedad. Ahora, nos hemos acostumbrado tanto a tener toda la información al momento que, no valoramos su llegada ni su espera. Compramos desde el sofá de casa a las 11 de la noche y queremos que nos llegue al día siguiente. A veces llega, a veces tarda un poco más. Y los carteros arriba y abajo todo el día con los carros y las cajas de las motos llenas a rebosar de cosas para YA!!.
Aunque son muchos los libros que hablan de cartas, buzones y carteros os dejo mi pequeño homenaje para el día del cartero, una propuesta de varias novelas que hablan sobre cartas y carteros, sobre amores y secretos, sobre crímenes y viajes espaciales…
La cartera de Francesca Giannone
En Lizzanello, un pueblecito de unos pocos miles de almas, un autobús de línea se detiene en la plaza mayor y baja una pareja: él, Carlo, es hijo del sur y está contento de regresar a casa; ella, Anna, su esposa, nacida en el norte, está triste y preocupada: ¿qué vida le espera en esta tierra desconocida? Incluso treinta años después de ese día, para la gente del pueblo Anna seguirá siendo «la forastera», la diferente, la que no va a la iglesia, la que no se pasea por el pueblo, la que no se interesa por los chismes. Y Anna, orgullosa y esquiva, no se doblegará nunca a las leyes no escritas que oprimen a las mujeres del sur. Lo conseguirá gracias al amor que siente por su marido. Más tarde, hará algo realmente revolucionario: se presentará al concurso para ocupar un puesto en correos. «La cartera», como Anna quiere que la llamen, se convertirá en el hilo invisible que une a los habitantes del pueblo y sus historias. Primero a pie y después en bicicleta…
Ya nadie escribe cartas de Eun-Jin Jang

Jihun decide marcharse de la casa familiar con su perro Wajo. En la mochila lleva un reproductor MP3, un libro y algunos útiles para escribir. Viaja sin rumbo, de motel en motel, conociendo a gente en la carretera. En lugar de aprender los nombres de sus compañeros de viaje, les asigna números. Está el 239, por ejemplo, que una vez soñó con ser poeta, pero que ahora solo lee sus poemas a un amigo que está en coma; está el 109, que viaja constantemente en tren a causa de una ruptura amorosa, o el 32, que ya ha decidido acabar con su vida. Cada noche, antes de irse a dormir, Jihun escribe una carta a una de las personas que ha conocido. ¿Terminará su viaje cuando reciba la primera respuesta?
Cartero de Charles Bukowski
Una autobiografía en la que Bukowski escribe sobre los doce años que estuvo empleado en una sórdida oficina de correos de Los Ángeles. El libro termina cuando Chinaski/Bukowski abandona la miserable seguridad de su empleo, a los 49 años, para dedicarse exclusivamente a escribir. Y escribe Cartero, su primera novela. Una hilarante e increíble sátira destinada a convertirse en un clásico.
Seguro que si eres cartero te sentirás muy identificado.
El cartero del espacio de Guillaume Perreault

A Bob le encanta su trabajo y su pequeña rutina, fácil y sin complicaciones: ¡para él, el correo es sagrado! A bordo de su nave espacial reparte cartas y paquetes a un montón de gente por toda la galaxia. Al menos, por la parte de la galaxia que él conoce. Pero esta mañana, en la oficina de correos, algo sucede… Un nuevo itinerario acaba con la rutina habitual de nuestro cartero. Aunque de entrada parece que Bob no se adapta a su nuevo trayecto, finalmente se dará cuenta de que los pequeños cambios pueden provocar aventuras que vale la pena vivir.
Lady Susan, de Jane Austen.
Esta novela epistolar, escrita probablemente en 1794, narra los planes de la protagonista, la recientemente viuda lady Susan, para encontrar un nuevo marido, a la vez que intenta casar a su hija de dieciséis años.
Austen se sirve de este género para construir una obra en donde las distintas cartas se engarzan como piezas de un rompecabezas hasta completar ante los ojos del lector una historia de pequeñas intrigas. La obra subvierte todas las normas de la novela romántica: lady Susan tiene un papel activo; no sólo es hermosa, sino también inteligente e ingeniosa, y sus pretendientes son significativamente más jóvenes que ella.
El invierno que tomamos cartas en el asunto, de Ángeles Doñate.

Llega el invierno a Porvenir y trae con él una mala noticia: por falta de cartas, cerrarán la oficina de Correos y trasladarán al personal. Los sms, correos electrónicos y whatsapps parecen haber ganado la partida también en medio de las montañas.
Sara, la única cartera del pueblo, nació y vive allí con sus tres hijos pequeños. Comparte muchas horas con su vecina Rosa, una mujer de ochenta años que estaría dispuesta a cualquier cosa por evitarle sufrimientos a Sara y a los niños.
Pero ¿qué puede hacer una anciana para impedir que las vidas de las personas que más quiere se vean trastornadas? Pues algo tan pequeño como escribir una carta, una que tiene guardada en su corazón desde hace sesenta años…
La sociedad literaria del pastel de piel de patatas de Guernsey, de Mary Ann Shaffer
En un Londres devastado por las bombas y que empieza a recuperarse de las terribles heridas de la Segunda Guerra Mundial, Juliet Ashton, una joven escritora en busca de inspiración novelesca, recibe la carta de un desconocido llamado Dawsey Adams. El hombre, que vive en la isla de Guernsey, un pequeño enclave en el canal de la Mancha, está leyendo un libro de Charles Lamb que había pertenecido con anterioridad a Juliet. ¿Cómo ha llegado ese ejemplar hasta Guernsey? ¿Por qué Dawsey decide ponerse en contacto con Juliet?
Dawsey es miembro del club de lectura La Sociedad Literaria del Pastel de Piel de Patata de Guernsey, creado en circunstancias difíciles durante la contienda, una rareza en tiempos de ocupación alemana. Cuando Juliet acepta la invitación de estos excéntricos lectores para visitar Guernsey, entiende que ellos y su increíble sociedad literaria serán los personajes de su nueva novela, y su vida dará un vuelco para siempre.
Una historia humana y divertida, que transmite una intensa pasión por los libros y reivindica la formidable capacidad de la lectura para unir a personas de distintos gustos, culturas e ideologías.
El cartero de los Haikus de Deni Theriault

Hace cinco años que Bilodo es el cartero de una pequeña ciudad de Canadá y solo ha faltado una vez a su trabajo para asistir al entierro de sus padres, muertos en un accidente de funicular…
Y es que Bilodo es un hombre peculiar con algunas manías: cuenta los peldaños que sube a diario, que suman un millar y medio, y cree que, si subir escaleras fuese una modalidad olímpica, tendría la posibilidad de ocupar el podium. También es aficionado a la caligrafía y tiene una afición secreta: leer la correspondencia íntima que reparte como cartero.
Todas las noches, Bilodo abre las cartas con vapor, las copia y las clasifica por su contenido. De manera que el destinatario recibe el original con un día de retraso. Así fue cómo conoció a Ségolène. Una joven y guapa maestra que envía mensajes cortos a un tal Grandpré, un hombre barbudo y desmelenado al que Bilodo siempre ve ataviado con un kimono rojo.
Los mensajes cortos de Ségolène, siempre de tres líneas, fascinan a Bilodo, sobre todo cuando se entera de que son haikus.

El cartero audaz de Sento
Es un álbum en el que se recopilan varias historietas que provienen de trabajos de encargo que realizó Sento. En esta recopilación el autor ha variado, redibujado e incluido nuevos dibujos que no existían en los anteriores encargos e incluso para darle un aspecto más unitario le ha dado un tratamiento de grises similar en todas las páginas.
84, Charing cross road de Helen Hanff

A finales de 1940 la joven neoyorquina Helene Hanff solicita algunas obras a Marks & Co., una librería londinense situada en el número 84 de Charing Cross Road. A esta primera misiva seguirán otras para agradecer los envíos, para mandar nuevas peticiones, para pagar ingeniosamente los libros cuando faltan recursos… o simplemente para hablar, opinar, recomendar, ironizar.
A lo largo de veinte años, la correspondencia entre la escritora americana y su librero inglés, Frank Doel, forjará una amistad basada en el amor a la literatura que hará de Helene parte indispensable de Marks & Co.
Aquella librería ya no está hoy en esa dirección, pero el 84 de Charing Cross Road se ha convertido en un lugar de culto, a la par que este libro constituye el mejor homenaje de un lector a su librero.
Nos vemos en el museo, de Anne Youngson
Tina, una granjera inglesa, esposa y madre, acaba de perder a Bella, su mejor amiga; Anders, conservador de un museo arqueológico en Dinamarca, enviudó hace años. Aunque no se conocen, su nexo de unión es el hombre de Tollund, un hombre prehistórico que se exhibe en el museo donde trabaja Anders y que Tina siempre quiso visitar junto a Bella. Tina envía una carta al museo sin esperar una respuesta, pero sorprendentemente esta llega, y así empieza una correspondencia en la que Anders y ella compartirán reflexiones y sentimientos y en la que pondrán al descubierto cómo es la vida que llevan. De un modo pausado y lleno de delicadeza, Tina y Anders se hacen amigos.
Cartas de Papa Noel de J.R.R. Tolkien

Todos los años en el mes de diciembre, los hijos de J.R.R. Tolkien recibían cartas de Papá Noel. El presente libro recoge todos los extraordinarios dibujos y cartas, desde la primera nota para su hijo mayor en 1920 hasta la última y conmovedora correspondencia con su hija en 1943, en una única y nueva edición.
En estas cartas, «Papá Noel» relataba maravillosas historias sobre la vida en el Polo Norte. En ocasiones el Oso Polar hacía algún garabato, y a veces Ilbereth, el elfo, escribía algún mensaje con su letra elegante y fluida, añadiendo aún más vida y humor a las historias.
El mundo del cartero, las cartas y los sellos sigue siendo un misterio para muchos pequeños. Hay libros que descubren este oficio de una forma a veces divertida, a veces emotiva y otras con mucha imaginación.
Miniconejo se ha perdido de John Bond
Mamá Conejo escribe una carta a Yaya Conejo invitándola a merendar. Mini Conejo, que quiere ayudar a su madre, insiste en encargarse de echar la carta. Sin embargo, su camino hasta el buzón no va a resultar nada fácil.
Aventura, ingenio y mucho humor
Cartas en el bosque de Susana Isern – Daniel Montero Galan

Una entrañable y sorprendente historia que va a emocionar a pequeños y mayores, porque muchas veces lo más maravilloso se encuentra donde menos imaginamos.
Marcelo el cartero – La calle Barullo de Kate Hindley
¡Bienvenido a la calle Barullo! Paseando por sus calles conocerás a todos sus vecinos: Marcelo, el cartero; Prima Pavlova, la profesora de danza; Mono Manitas, el mecánico, y muchos más. Calle Barullo es un libro con solapas para los más pequeños
Agus y los monstruos – Los carteros del espacio de Jaume Copons
¡Eh, hola! Soy Agus Pianola. Puede que ya me conozcas, ¿verdad? Entonces también sabrás que desde hace tiempo comparto lecturas y momentos extraordinarios con el Sr. Flat y su banda de monstruos. Esta vez, el Dr. Brot la ha liado muy gorda: se ha dedicado a lanzar proyectiles al espacio con un mensaje que dice que la Tierra es un lugar muy peligroso que hay que destruir. ¿Te lo imaginas? Suerte que los tres carteros del espacio todavía están en activo y nos ayudarán a interceptar esas peligrosas misivas. ¿Preparado? ¡Despegamos en misión espacial!

El correo del dragón de Emma Yarlett
Álex siempre ha querido tener un dragón y ¡por fin lo ha conseguido! Ahora el problema está en saber cómo cuidarlo… Por eso decide escribir a varias personas muy sabias que le ayudarán a hacerlo. ¿Qué consejos le darán?
El cartero de los sueños de Laura Gallego
En un mundo en el que las casas ya no están pegadas al suelo y los edificios son muy, muy altos, el Cartero de los Sueños vuela para conseguir que las cartas lleguen a salvo a sus destinatarios. Este cartero volador se encarga de repartir sueños a todo el mundo por las noches, por lo tanto, vive de noche. Se levanta antes de que se ponga el sol, come y se va a trabajar.
Sólo existe un pequeño problema: que se siente solo, no habla con nadie, no tiene amigos. En la oficina donde trabaja están todos muy ocupados trabajando, y los demás están durmiendo, además, con la única persona que podía entablar alguna conversación es su enemigo el Cartero de las Pesadillas, con el que se lleva realmente mal. Este cartero se dedica a repartir pesadillas a la gente, e incluso se atreve a tirar los sueños que ha dejado el Cartero de los Sueños para imponer sus pesadillas. Por eso estos dos carteros siempre estaban discutiendo.
Hasta que un día es sorprendido por una niña llamada Marta, con quien entabla una amistad, y en una de sus conversaciones surge una duda: ¿por qué el Cartero no puede soñar?
Para terminar, por si queréis saber más sobre la historia de las cartas y los carteros, podéis leer Cartas y carteros. Una historia del correo postal, de Antonio Aguilar.
¿Escribimos una carta?
- Campanya Val escolar - 14/06/2024
- Citas literarias: El Bloomsday - 12/06/2024
- Concurs monstruós – Agus i els monstres - 31/10/2023